RANCHO NO. 21

MARZO-ABRIL DE 1985

AUTORES: Biol. Oscar Cázares de H.

Ing. Martha H. Martín R.

Ing. Fernando A. Ibarra F.

La mosca pinta es una plaga importante de los pastos y de algunas plantas de cultivo que ha existido en nuestro país desde hace mucho tiempo; sin embargo, a raíz de las inundaciones de las Huastecas en 1955, se ha venido presentando intensamente año tras año. En Sonora, la mosca pinta tomó importancia hasta 1980, cuando se hicieron notorias las infestaciones en la Zona Sur del Estado, llegando a una situación alarmante en 1984, posiblemente como resultado de la buena precipitación de los últimos años.

Cuando las infestaciones de mosca pinta son marcadamente altas, se llegan a perder grandes extensiones de pastos. En la década de los 60’s, se reportaron pérdidas de 60,000 a 400,000 hectáreas de pastizales de las 6 millones existentes en la región del Golfo de México, perdiendo los ganaderos cerca de 500 millones de pesos anuales.

En Sonora, durante 1984 se presentaron muy buenas lluvias; a consecuencia de ésto, se detectó en la región central del Estado de 1 a 45 ninfas/planta en áreas con un pastoreo intensivo (carga alta) y de 1 a 212 ninfas/planta en áreas con un pastoreo ligero (carga baja), por lo que se espera que la población aumente en los próximos años y por consiguiente, los daños en las praderas de zacate buffel.

La mosca pinta pasa por tres etapas de desarrollo durante su vida, las cuales son: huevecillo, salivazo y adulto. El huevecillo es de forma oval, de color amarillo o crema muy pequeño, apenas visible a simple vista, mide de 0.8 mm de largo por 0.3 mm de ancho y tiene un área por donde sale el salivazo cuando nace.

La duración del huevecillo es de 15 a 18 días, durante el verano y de 5 a 11 meses en invierno. Los huevecillos se encuentran en la base de la cepa de los pastos, y algunas veces hasta un centímetro bajo la superficie del suelo, donde la hembra deposita un promedio de 40 a 100 huevecillos.

Aproximadamente 15 días después de las primeras lluvias de verano, hacen su aparición los primeros estados jóvenes del insecto sin alas, conocidos como salivazos o ninfas.

El salivazo es llamado así, debido a la espuma con aspecto de saliva que excreta por el extremo anal, con la cual cubre su cuerpo protegiéndose de la deshidratación y, en parte, de sus enemigos, su cuerpo es amarillo y la cabeza rojiza, pero a medida que crece va cambiando de coloración y al final es de color crema con pigmentos rojos a los lados del abdomen; su tamaño al nacer es de 1 mm y llega hasta 9 mm de largo al terminar su desarrollo. El salivazo o ninfa presenta 5 etapas de crecimiento o estadios ninfales, los cuales tienen una duración de 20 a 26 días. A partir de la quinta etapa, se desarrolla el adulto presentando alas bien definidas.

El adulto es un insecto parecido a una chicharrita, su cuerpo es de forma oval, con cabeza negra brillante. Presenta dos pares de alas; las alas superiores de la mosca pinta más común son de color café oscuro, con dos o tres bandas transversales de color amarillo o rojo claro; sin embargo, se pueden encontrar algunas moscas sin bandas. El tamaño de los adultos es de 7 a 9 mm de largo por 5 a 6 mm de ancho, con una duración media de vida para el adulto, de 12 a 15 días. En regiones tropicales y sub’tropicales se han reportado hasta 4 generaciones al año, sin embargo, para las zonas semi-desérticas se han reportado solo dos generaciones.

Las principales plantas que ataca la mosca pinta son: caña de azúcar, maíz, arroz, sorgo y varias especies de pastos nativos e introducidos que a continuación se enlistan: