El ensilaje es otra de las alternativas en la conservación de forrajes; es importante, porque podemos disponer de alimento para ganado en poco tiempo después de haberse ensilado, y además, quizá lo más importante, es utilizarlo cuando se desee sin importar el tiempo transcurrido después de haberse ensilado.

El ensilaje es muy apetecible y nutritivo siendo ideal utilizarlo en épocas críticas de escasez de alimento en los agostaderos.

En forma general el ensilaje en el Estado de Sonora, puede ser empleado como ingrediente en las raciones alimenticias que se manejan para alimentar 17,000 vacas productoras de leche, 35,000 cabezas en crecimiento y pre-engorda, en praderas de ryegrass, t 134,000 animales en corrales de engorda.

Alguna de las ventajas de ensilar las cosechas forrajeras son:

a) Se conserva mayor cantidad de principios nutritivos para la alimentación de los animales, por un mayor período de tiempo.

b) Se elimina en parte la utilización de alimentos complementarios, especialmente alimentos concentrados ricos en proteínas.

c) El alimento que se obtiene mediante el ensilado es de mayor calidad que el de otros métodos de conservación.

d) En ensilaje se puede tener almacenado con mínimas pérdidas de nutrientes mientras que por ejemplo el heno, a los dos años habrá perdido la mayor parte de sus riquezas de vitamina A principalmente.

e) La planta a ensilar se puede cosechar cuando está en su máxima producción y calidad nutritiva.

Si es importante, porque los forrajes con alto contenido de agua, o sea tiernos, son difíciles de ensilar debido a que el agua diluye los carbohidratos que contiene el forraje depositándolos en el fondo del silo, ocasionando un ensilaje de mala calidad. Por otra parte, forraje con bajo contenido de agua son difíciles de compactar, quedando dentro del material ensilado cantidades de aire que provoca calentamientos, lo cual produce quemaduras del material ensilado y formación de hongos afectando la calidad del ensilaje.

Si el contenido de humedad es bajo (50%), se puede agregar agua distribuyéndola bien sobre el forraje; calcular 25 lt de agua por cada 100 kg de forraje a ensilar. Por lo tanto para evitar lo anterior, el porcentaje de agua del forraje deberá ser de 66 a 72%.

Existen varias formas para determinar la humedad de un forraje, pero la más sencilla es el aprisionamiento del forraje en un puño haciendo las siguientes observaciones:

a) Tomando un puño de forraje picado y apretandolo durante 30 a 40 segundos, observamos que se mantiene compacto y que hay un gran escurrimiento por entre los dedos, entonces tenemos un forraje con más del 75% de humedad.

b) Cuando el forraje picado y apretado en el puño escurre poca agua y al soltarlo mantiene su forma compacta, estamos ante un forraje con un 70% a 75% de humedad.

c) Cuando al apretar el forraje no hay escurrimiento de agua y al soltarlo se desmorona lentamente, el forraje tiene de un 60 a 70% de humedad.

d) Cuando al apretarlo no escurre agua y al soltarlo se desmorona rápidamente, el forraje posee menos del 60% de humedad.

El picado del forraje es un paso muy importante para conseguir un buen ensilado, ya que la deficiencia en esta práctica, ha sido la causa de que muchos ensilajes no sean de la calidad deseada. Este se deberá hacer de tal manera que se obtengan trozos de 1 a 3 centímetros de longitud, con el fin de lograr una buena compactación del forraje y así desalojar todo el aire posible contenido entre sus partes.

Es conveniente compactar bien el forraje que se deposita en el silo para que salga todo el aire y evitar así que los microorganismos que viven en presencia de oxígeno se sigan desarrollando.

Por otra parte, también existen otras formas de vida, que si pueden sobrevivir en ausencia de aire, las cuales, en estas condiciones se multiplican en gran cantidad y al efectuar sus funciones vitales a expensas del material azucarado que posee el forraje, producen: Acido láctico, ácido acético y otros que disminuirán el PH del forraje hasta 4.0 que es el punto de acidez óptimo para un ensilado.

La producción de estos ácidos, impide el desarrollo de las bacterias que provocan la putrefacción y de olor desagradable en un mal ensilado. Una vez que se han producido estos ácidos en la cantidad suficiente, la fermentación se detiene, estos cambios deben llevarse de 20 a 30 días como máximo.

Si el forraje esta en un silo perfectamente sellado y sin acceso de agua ni aire, el ensilaje se conservará no solo por meses sino por años sin perder sus propiedades nutritivas y gustocidad.

Existen silos aéreos y subterráneos de forma vertical y horizontal, este último comúnmente llamado silo de trinchera, es el más recomendado debido a que se facilita el llenado y la utilización del ensilaje.

Son menos costosos y fáciles de construir.

Los pasos que se siguen para calcular el tamaño de un silo son los siguientes:

Primero:

Se calcula la cantidad de ensilaje que vamos a utilizar; esto se logra multiplicando el número de animales que alimentaremos por la cantidad de ensilaje que les daremos por día a cada animal, y el resultado obtenido lo multiplicamos por el número de días que alimentaremos a los animales.

Segundo:

Una vez que calculemos la cantidad de ensilaje que necesitamos y conociendo que la densidad del ensilaje, es de 600 a 700 kg por M3, procederemos a obtener las medidas necesarias del silo donde se almacenará esa cantidad de forraje.

La cantidad de ensilaje que necesitaremos la obtendremos multiplicando:

axbxh=x

Donde

a = Número de animales

b= Cantidad diaria de silo por animal

h = Número de días que se alimentarán, a los animales con ensilaje.

x = Cantidad de forraje ensilado que necesitamos.

Por ejemplo:

Necesitamos alimentar 200 animales constantes en una engorda en la que se darán 10 kg diarios de forraje ensilado más el resto de la ración durante 6 meses.

aplicando la fórmula anterior quedaría:

200x10x180 = 360,000 kg.

Se recomienda construir silos con capacidad para almacenar de 500 a 1000 toneladas de forraje, no es muy aconsejable construir silos de mayor capacidad, debido a que de surgir cualquier eventualidad se perdería gran cantidad de forraje, es más recomendable construir 2 silos si se necesitan más de 1000 toneladas de forraje ensilado.

Para construir un silo que tenga capacidad para almacenar las 360 toneladas que calculamos, en el caso anterior, se pueden hacer varias combinaciones de anchura, longitud y profundidad; por experiencias obtenidas en la práctica se recomienda que la profundidad del silo no sea mayor de 4 M. la anchura de la base menor puede variar entre 3 y 5 M. el talud o sea la inclinación de las paredes de 3:1 ó 4:1, por lo tanto la base mayor deberá medir de 5 a 7 M.

Para nuestro ejemplo tomaremos las medidas del siguiente corte transversal de un silo:

Base mayor = 7 M

Base menor = 5 m

Profundidad = 3 m

Talud = 3:1

Longitud = x

Con estas medidas aplicamos la siguiente fórmula:

a = a+bxh

2

Donde

a) = Base mayor

b) = Base menor

c) = Profundidad

d) = Area de corte

Substituyendo

7 M + 5 M x 3 M = 18 M2

2

Entonces, en 1 M de longitud de toda el área del silo habrá 18 M3, porque 1 M x 18 M2 – 18 M3, si tomamos la densidad de 600 kg de ensilaje por M3, en 18 M3, tendremos 10.800 kg o sea en 1 M de longitud del silo por lo tanto si:

En 1 M lineal (caben) 10.8 Ton.

Cuantos M. lineales (necesito) 360 Ton.

(para)

x = 360 = 33.3 M

10.8

Entonces nuestro silo tendrá las siguientes dimensiones.

Base mayor = 7 M

Base menor = 5 M

Profundidad = 3 M

Longitud = 33.3 M

Talud = 3:1 M