MEMORIA TÉCNICA NO. 9

MARZO DE 1995.

EFECTO DEL GRASSLAN 40 P EN EL CONTROL DE CHIRAHUI (Acacia cymbispina) Y VINORAMA (A. farnesiana) EN UNA PRADERA DE ZACATE BUFFEL (Cenchrus ciliaris)

EN LA REGIÓN CENTRAL DE SONORA.

Enrique Enríquez C.

Francisco J. Peñuñuri M.

Felipe Ramírez M.

RESUMEN

El presente estudio se desarrolló en una pradera de zacate buffel ubicada en el municipio de Carbó, Sonora, donde el clima es semiárido, con una precipitación promedio de 294 mm y una temperatura media anual de 23 C. El objetivo fue evaluar cinco dosis del herbicida granular Grasslan 40P (tebuthiuron) aplicadas en forma individual para el control de chírahui (Acacia cymbispina) y vinorama (A. farnesiana). La invasión del chírahui y vinorama fue de 1,500 y 1,200 plantas/ha, respectivamente, con rango de altura promedio de 0.8 a 2.30 m, y el diámetro del tronco fluctuó entre 1.0 y 6.0 cm, con predominancia de plantas jóvenes. Se aprobaron las dosis de 0.3, 0.6, 1.2, 2.4 y 4.8 gr de ingrediente activo (i.a.) de tebuthiuron por planta (tratamientos 1,2,3,4 y 5). La aplicación fue al inicio de las lluvias de verano. Cada tratamiento se aplicó a un total de cinco plantas de cada especie utilizando un diseño completamente al azar con cinco tratamientos y cinco repeticiones. Se evaluó la mortandad de arbustos al año de hacer la aplicación del herbicida. En chírahui, los tratamientos del 2 al 5 mataron al 100% de los arbustos, resultando diferentes (P<0.05) al tratamiento 1, que sólo logró el 20% de mortalidad. En vinorama la mortalidad fue de 60, 75, 80, 100 y 100% para tratamientos 1, 2, 3, 4 y 5, respectivamente, resultando diferentes (P<0.05) el tratamiento 1 respecto a los tratamientos 4 y 5.

La invasión de arbustivas indeseables en los agostaderos ha sido un problema que se presenta desde hace varios años en Sonora, atacando a pastizales nativos como a praderas de zacate buffel (Cenchrus ciliaris L.), debido principalmente a que estas plantas invasoras no son consumidas por el ganado y su propagación es muy rápida, por lo que desplaza gradualmente a las plantas forrajeras deseadas por los animales. Como consecuencia, la capacidad de carga animal de los agostaderos se ve reducida, al igual que la producción de carne por hectárea.

En la entidad, las arbustivas invasoras más importantes son: el chírahui (Acacia cymbispina), la vinorama (A. farnesiana) y la rama blanca (Encelia farinosa). De éstas, las dos primeras se han convertido actualmente en un problema serio en muchas de las praderas de zacate buffel y áreas de pastizal del centro y este del Estado¹.

La vinorama es un arbusto abierto de 0.5 a 4.0 m de altura con espinas rectas de 0.5 a 2 cm de largo, tiene hojas fasciculadas con longitud de 2.5 a 4 cm; su flor es de color amarillo y el cáliz mide de 1 a 1.5 mm de longitud. Sus vainas son lineales, aplastadas y arqueadas; con un ancho de 3 a 6 mm por 5 a 12 cm de largo. Se distribuye en planicies, cuencas, colinas y cerros rocosos en la parte baja y alta de Sonora, Texas, San Luis Potosí y Puebla².

El chírahui es un árbol de hasta 8 m de altura. Su corteza es agrietada de color negro-grisáseo, tiene espinas rectas desde ligeramente aplanadas hasta cóncavas, en forma de concha de 0.5 a 6 cm de longitud. Sus vainas son lineales oblongas aplanadas de 8 a 12 cm de ancho y de 4 a 14 cm de largo, con dehiscencia tardía. Las semillas son oboides de 5 a 6 mm de largo; se encuentra en laderas rocosas y planicies arenosas de Sonora, chihuahua, Veracrúz, Oaxaca y Guerrero.

Uno de los métodos más efectivos para el control de arbustivas indeseables es el control químico³. Los herbicidas granulares tebuthiuron, picloram y dicamba han sido ampliamente utilizados para el control de arbustos en pastizales 4,5, su fitotoxicidad perdura hasta después de un año de la aplicación⁶.

En base a lo anteriormente expuesto, se desarrolló este estudio el cual tuvo como objetivo evaluar el efecto del Grasslan 40P (Tebuthiuron) aplicado en forma individual a dosis diferentes para el control de chírahui y vinorama. Asimismo, determinar mediante un análisis económico, cuál dosis es la más redituable para el control de dichas arbustivas.

El estudio se llevó a cabo en una pradera establecida de zacate buffel invadida por chírahui y vinorama, con una densidad aproximada de 1,200 a 1,500 plantas/ha, con altura promedio de 1.50 m y con predominancia de plantas jóvenes.

La pradera se localiza en el rancho “Altiva”, a 460 msnm. El suelo es de textura franco-arenoso, profundo y con drenaje pobre. El clima es semiárido con una precipitación promedio anual de 325 mm.

El herbicida utilizado para la prueba fue el tebuthiuron granular (Grasslan 40P) en dosis de 0.3, 0.6, 1.2, 2.4 y 4.8 gr de i.a./pl para ambas especies de arbustivas. La prueba se inició junto con las lluvias de verano (julio) de 1991. El producto se depositó en la base y alrededor del tronco de los arbustos. Cada una de las dosis se aplicó a un total de 10 arbustos (cinco de chírahui y cinco de vinorama). Para el estudio se utilizó un diseño con distribución completamente al azar, con cinco tratamientos y cuatro repeticiones.

A los datos de mortalidad, se les aplicó un análisis de varianza y luego se utilizó la prueba de Chi cuadrada para detectar diferencias entre las medias de los tratamientos, haciendo pruebas por separado para cada especie arbustiva⁷. Los datos finales de mortalidad de arbustos se tomaron transcurrido un año después de la aplicación, considerándose muertas aquellas plantas que no presentaron rebrotes ni tallos verdes.

En el cuadro 1 se muestran los resultados sobre la mortalidad de chírahui obtenida con los diferentes tratamientos de tebuthiuron, notándose que las dosis probadas del herbicida mataron el 100% de las plantas tratadas, con excepción de las dosis de 0.3 g de i.a./pl que sólo mató al 20%.

El menor costo (N$0.13) por cada arbusto de chírahui controlado correspondió al tratamiento de 0.6 de i.a./pl, y el mas alto (N$1.21) para la dosis de 4.8 g de i.a./pl.

En el cuadro 2 se muestra la mortalidad de vinorama con los mismos tratamientos, donde al incrementar las dosis del herbicida (2.4 y 4.8 g de i.a./pl) se eliminó el 100% de los arbustos de esta especie. El costo por arbusto controlado fue menor cuando se aplicaron 0.6 g de i.a./pl de Tebuthiuron, incrementándose conforme se aumentó el costo del herbicida.

El efecto negativo del herbicida sobre el zacate, aun cuando no fue evaluado cuantitativamente, se acentuó cuando se utilizaron las dosis de 1.2, 2.4 6 4.8 g de i.a./pl, sin embargo las dosis más bajas de tebuthiuron (0.3 y 0.6 g de i.a./pl) afectaron de forma mínima a las plantas de buffel en contacto con el herbicida, produciendo solo una leve clorosis.

En base a los resultados, se concluyó que la vinorama tiene mayor resistencia al herbicida Grasslan 40P en comparación con el chírahui, siendo necesario una dosis de 2.4 g de i.a./pl para matar el 100% de estos arbustos, mientras que para eliminar el mismo porcentaje en el chírahui sólo se requiere de 0.6 gr de i.a./pl. El uso de este herbicida granular aplicado en forma individual (por planta) se recomienda en aquellos casos donde existen bajas poblaciones de arbustivas indeseables, particularmente en áreas donde se esté iniciando la invasión de éstas.

1.- Palomino C.V. y Enríquez C.E. 1986. Diagnóstico regional para el desarrollo de la investigación como contribución al incremento de la producción pecuaria de la zona sur y sierra del estado de Sonora. Encuesta por muestreo a productores pecuarios. PATROCIPES-CIPES 266 P.

2.- Shreve Fand Wiggins I L. 1964. Vegetation and flora of the Sonora Dessert. Stanford University Press. Stanford, Calif. 1:599.

3.- Gómez RF y González MH: 1980. Evaluación de Tordon 5 K para el control de arbustivas indeseables en la zona central de Chihuahua. Bol. pastizales, REC-INIP-SARH. Chihuahua, chih. Vol. XI No. 2.

Pettit R D. 1979. Effects of picloram and tebuthiuron pellets on sand shinery oak communities. J.Range Manage 32:196-200.

5.- Scifres S J. 1972. Sand shinery oak response to dicamba granules and picloram pellets. J. Range Management, 25:125-156.

6.- Klingman GC y Ashton FM 1980. Estudio de las plantas nocivas. Principios y prácticas. Traducido del inglés por Thomson, S.R.E. Editorial Limusa, México, D. F: p.449.

7.- Steel R G D and Torrie JH. 1981. Principles and procedures of stadistics. Ed, McGraw Hill Book Co., New York.