XII CONGRESO NACIONAL DE BUIATRIA (MEMORIAS)

AGOSTO 21, 22 Y 23 DE 1986

TAMPICO, TAMAULIPAS.

EFECTO DE TRES PRACTICAS DE MEJORAMIENTO COMO SON LA QUEMA, EL CHAPEO Y EL SUBSOLEO EN PRADERAS ESTABLECIDAS DE ZACATE BUFFEL (Cenchrus ciliaris L.).

Parra G.M.A.*, y F. Ramírez.

INTRODUCCION

El zacate buffel fue introducido al Estado de Sonora hace aproximadamente 25 años tomando tal auge que en la actualidad existen aproximadamente 250,000 Has, establecidas (Palomino et.al. 1983). La importancia alcanzada por este tipo de resiembra se debe a que utilizando el zacate buffel es posible aumentar la carga animal hasta 10 veces en comparación con los agostaderos nativos en algunos lugares (Peñuñuri et. al. 1983). Pero debido al mal manejo, principalmente el sobrepastoreo, se ha venido reduciendo la producción y calidad de las praderas por lo que se han venido utilizando algunas prácticas de mejoramiento con el fin de recuperar la cubierta vegetal aumentando con ello la productividad de éstas praderas. Sobre estas prácticas se han hecho algunos estudios como el realizado por Steuter y Wright, (1980) donde utilizaron la quema controlada, el cadeneo y diversas combinaciones de éstos mismos tratamientos encontrando diferencias altamente significativas en comparación con el control también Sharrow y Wright (1977) realizaron un estudio utilizando parcelas quemadas, chapeadas y control en una comunidad de zacate toboso encontrando que después de la quema las plantas crecen mas vigorosamente por el aumento de nutrientes en el suelo.

Determinar la respuesta del zacate buffel a prácticas como quema, chapeo y subsoleo en lo que respecta a su producción y calidad de forraje.

Este trabajo se realizó en el potrero denominado “El Texcoco” que se localiza a la altura del Km. 63 de la Carretera Internacional Hermosillo-Nogales y pertenece al Centro de Investigaciones Pecuarias del Estado de Sonora (CIPES). El sitio cuenta con 464 m.s.n.m., una precipitación media anual de 290 mm, y una temperatura media anual de 22.9^oC. La quema fue realizada durante la mañana, con antorcha y tomando en cuenta la velocidad del viento (4 Kms/hora) humedad relativa ambiental (75%) y temperatura ambiental (19.5^oC). El chapeo se efectuó con tacuachadora, cortando el zacate a una altura de 15 Cm y el subsoleo fue hecho en forma perpendicular a la pendiente con una distancia de 75 cms entre picos y a una profundidad de 30 cms. Las parcelas experimentales cuentan con una superficie de 15 x 20 m, con tres repeticiones por tratamiento en un diseño experimental de bloques al azar. Las evaluaciones se hicieron cada seis meses durante tres años en base a datos de densidad de plantas/m2, cobertura basal (%) producción de forraje (Kg.m.s./ha), contenido proteico (% P.C.) y fibra detergente neutro (% FDN).

Los resultados obtenidos cuatro meses después de la aplicación de los tratamientos muestran diferencias significativas (P<0.05) solo en el contenido de fibra detergente neutro (FDN) con el valor mas alto en el chapeo con 79.65% y mas bajo en la quema y el testigo con 76.78% y 76.53% respectivamente. El segundo año 1983 la cobertura basal no presentó diferencias significativas *P>0.05) para el subsoleo con 9.4%, chapeo con 8.6% y el testigo con 7.4%, pero fueron significativamente diferentes a la quema que tuvo un valor de 5.4%, también hubo diferencias significativas (P<0.05) entre fechas de muestreo, teniendo en Junio una cobertura promedio de 9.4% y en Noviembre 6.0%. En 1984 la media del subsoleo que fue de 12.5% superó significativamente (P<0.05) a los otros tres tratamientos, los cuales no tuvieron diferencias significativas (P>0.05) entre sí. La cobertura promedio en Noviembre fue en este año superior significativamente (P<0.05) a la cobertura promedio en junio con 11.0% y 8.1% en forma respectiva. En lo que a densidad se refiere el subsoleo superó significativamente (P<0.05) a los demás tratamientos que no tuvieron diferencias entre si durante 1983 y 1984, existiendo diferencias entre fechas sólo en 1984 con 11.4 plantas/m2, en Noviembre y 8.9 plantas/m2 en Junio. En cuanto a producción, en 1983 la más alta (1540 kg M.S./ha) se obtuvo con el subsoleo en comparación con los otros tratamientos que no tuvieron diferencias entre sí (P>0.05). Sin embargo, en 1984 la mayor producción se obtuvo con el tratamiento de quema con 1130 kg m.s./ha. El subsoleo y el chapeo con 1061 y 1045 kg.m.s./ha no presentaron diferencias entre sí pero fueron mejores al testigo donde únicamente se obtuvo una producción de 716 kg m.s./ha. Entre fechas de muestreo para proteína con 6.4% en Junio y 4.9% en Noviembre y para fibra detergente neutro en 1983 con 78.0% en Noviembre y 71.8% en Junio, y en 1984 con 71.7% en Noviembre y 67.5% en Junio. Con los resultados obtenidos podemos concluir que con la aplicación de prácticas de mejoramiento tales como la quema, el chapeo y el subsoleo si se puede obtener una respuesta positiva de la vegetación. Siendo esta respuesta mas rápida con la remosión del suelo y a largo plazo con la quema.