REVISTA RANCHO NO. 74

FEBRERO DE 1996.

AUTOR: Ricardo Campos Ruelas.

ENFERMEDADES QUE DISMINUYEN LA PRODUCCION DE BECERROS: LEPTOSPIROSIS.

La principal actividad comercial de la ganadería sonorense es la producción de becerros(as) para exportación o para la engorda. Por lo tanto, cuando la producción de becerros es baja, las ganancias económicas que reciben los ganaderos son igualmente escasas.

El número de nacencias depende de muchos factores, entre los que sobresalen la calidad genética del ganado, enfermedades del tracto reproductor, mala alimentación, sistemas de producción, etc. Las enfermedades del tracto reproductor se manifiestan casi siempre con ausencia de calores, reabsorciones embrionarias y abortos. Los rancheros llegan a considerar normal el número de pariciones de su ganado, ignorando que muchas crías se pierden durante la gestación.

Las principales enfermedades que afectan el tracto reproductor son: Leptospirosis, Brucelosis, Vibriosis, Toxoplasmosis, IBR, Tricomoniasis y Hemofilosis. En el presente escrito se tratará únicamente la primera y las restantes en otra oportunidad dada la gran importancia que tienen en la productividad ganadera.

La Leptospirosis, que también se le conoce como la enfermedad de la orina roja de los becerros, es producida por la bacteria Leptospira y se caracteriza por afectar gravemente los riñones e impide que las vacas entren en calor, que las recientemente cargadas reabsorvan sus embriones o que se presenten abortos cuando la gestación esta avanzada. El 100% de los becerros logra enfermar y solo el 50% llega a orinar de color rojo. En los adultos, el 70% puede enfermar y el 35% puede presentar aborto.

De acuerdo a un estudio realizado por PATROCIPES, la Leptospirosis está difundida en los municipios de Carbó, Costa de Hermosillo, Ures, Arizpe y Cucurpe, con 65.4% de animales positivos (cuadro 1). De acuerdo a las condiciones climáticas, tipo de ganado, forma de explotación, fauna silvestre, etc., se puede pensar que el resto de los municipios del Estado tienen un porcentaje similar.

La fuente de infección son los orines de los bovinos enfermos, así como el de los ratones de campo, conejos, liebres y otros animales silvestres. La principal vía de entrada es por las mucosas de los ojos, vulva, nariz, etc., es decir, se requiere que esos tejidos tengan contacto con los orines de animales enfermos. La infección oral con agua o alimentos contaminados es la segunda en importancia.

La Leptospirosos afecta tanto a animales jóvenes como adultos; en ambos casos con manifestaciones clínicas distintas. En los jóvenes se caracteriza por producir fiebre, agotamiento, falta de apetito, respiración acelerada y mucosas amarillas (ictericia) que retornan al color rosa poco tiempo después; algunos de los enfermos llegan a orinar de color rojo claro u obscuro por no más de 72 horas, volviendo después al color amarillo ámbar normal.

La Leptospirosis en los bovinos adultos logra pasar en muchas ocasiones desapercibida. Generalmente solo se ve baja producción de becerros; la leche de las vacas afectadas es espesa, de color amarillo cremoso y con rastros de sangre, semejante a la leche proveniente de ubres con mastitis. Los abortos se presentan entre el sexto y séptimo mes de gestación.

Las variedades de Leptospiras que están íntimamente relacionadas con reabsorciones embrionarias y abortos son pomona y hardjo. En un trabajo de investigación realizado en varios municipios de Sonora se encontró que estas dos variedades estuvieron presentes (Cuadro 2).