INVESTIGACIÓN PECUARIA EN EL ESTADO DE SONORA.

OCTUBRE DE 1989.

DIAGNÓSTICO PECUARIO REGIONAL DE LA ZONA SIERRA DEL ESTADO DE SONORA. MANEJO DEL AGOSTADERO.

Enrique Enríquez

Antes de iniciar cualquier proyecto de investigación de tipo pecuario, es prioritario conocer a fondo la problemática ganadera y las características particulares de la región que se pretende beneficiar. Esto permitirá enfocar correctamente la investigación hacia la resolución de los principales problemas y generar tecnología que sea realmente de utilidad para la ganadería de la zona.

En base a estas consideraciones, en el año de 1984 se efectuó el presente estudio que, como su nombre lo indica, consistió en una diagnosis sobre la actividad pecuaria en la zona sierra del Estado. Los aspectos que comprendió dicho estudio fueron, entre otros: Manejo de los agostaderos, forrajes cultivados, nutrición, reproducción, sanidad del hato e infraestructura en los ranchos; pero lo que aquí se trata es exclusivamente sobre el primer aspecto. El estudio se basó en una encuesta por muestreo dirigida a pequeños propietarios ganaderos, entrevistándose a un total de 130 productores de los 13 municipios que comprende el área de influencia de la brigada interdisciplinaria de investigación aplicada del CIPES, en la zona serrana del Estado. Dicha área colinda al Este con el Estado de Chihuahua y su extensión territorial es de 19,454 Km2, que representa el 10.5% de la superficie total del Estado. La actividad económica principal de esta zona es la ganadería de tipo extensivo y los municipios que la integran son: Bacadehuachi, Bacerac, Bavispe, Cumpas, Divisaderos, Granados, Huachinera, Huasabas, Moctezuma, Nacori Chico, Nacozari, Tepache y Villa Hidalgo.

Los pasos que se siguieron para la realización del presente estudio y que se detallan en Avances de Investigación Pecuaria en el Estado de Sonora 83-84, páginas 181-182, fueron, en el orden en que se mencionan: diseño de la cédula de entrevista, delimitación del tamaño de la muestra, programación del trabajo de campo, levantamiento de encuestas, procesamiento y análisis de la información recabada y, finalmente, publicación del volumen respectivo. Los puntos que se comprenden en el aspecto del manejo de los agostaderos, que es el que nos ocupa, se refieren a la carga animal en los agostaderos de la zona, división y manejo de potreros, problemas de plantas tóxicas e invasoras, agostadero resembrado en el rancho y condición de los pastizales.

CARGA ANIMAL EN LOS AGOSTADEROS. La carga animal media utilizada en la zona es de 9.72 ha de agostadero por unidad animal. La carga animal media recomendada para la misma zona es de 22.55 ha/u.a., lo que representa una sobrecarga promedio de 132%. Los mayores porcentajes corresponden a los municipios de Tepache y Huasabas, con 236% en ambos casos; mientras que las mas bajas sobrecargas corresponden a los municipios de Granados, Huachinera, Nacozari y Nacori chico, con 45.5, 68, 71 y 91% respectivamente. El resto de los municipios resultaron con porcentajes de sobrecarga que van desde 104, como en el caso de Bacadehuachi, hasta 178, en el caso de Bacerac (cuadro 1). Para el cálculo de las cargas animal recomendadas, que aparecen en el cuadro antes citado, se tomaron en cuenta los diferentes tipos de vegetación predominantes en los ranchos, así como también las condiciones de pastizal existente en los agostaderos de los mismos lo que se observó mediante un recorrido por cada uno de los predios considerados en la encuesta. Las cargas animal utilizadas se calcularon considerando únicamente el hectareaje de pastizal a nivel de agostadero, excluyendo tierras agrícolas de riego y temporal.

DIVISIÓN Y MANEJO DE POTREROS. De los 130 ranchos que comprendió el estudio, 128 cuentan con cercos perimetrales; de estos, 101 (79%) tienen división de potreros. Los municipios de Bacadehuachi, Cumpas, Divisaderos, Granados y Nacozari sobresalen con mas del 90% de sus predios con división de potreros, mientras que los de Tepache y Villa Hidalgo resultaron con los porcentajes mas bajos (cuadro 2). En cuanto a número de potreros por predio, 52 ranchos, que significan el 51.5% de los 101 con divisiones, poseen entre dos y tres potreros; 30 (30%) tienen entre cuatro y cinco; 15 (15%), entre seis y ocho, y solo cuatro (4%) cuentan con 10 ó mas potreros (cuadro 2). En lo referente al manejo y utilización de potreros, 50 (49.5%) de los ranchos con estas divisiones, además de contar con potreros de reserva para las épocas críticas del año, hacen rotación de pastoreo durante el año en el resto de los potreros, 42 ranchos (42%) tienen potreros de reserva, pero no hacen rotación; es decir, tienen el ganado distribuido durante todo el año en todos los potreros y solamente los desalojan durante los meses mas secos del año, cuando se pastorean los potreros de reserva. Asi mismo, en seis predios (6%) hacen rotación de potreros, pero no cuentan con potreros de reserva; y únicamente tres predios no hacen rotación ni tampoco utilizan potreros como reserva (cuadro 3).

PROBLEMAS POR PLANTAS TÓXICAS E INVASORAS. En cuanto a plantas tóxicas, 40 productores (31%), de los 130 encuestados, mencionaron tener problemas en sus ranchos con este tipo de plantas. Los municipios de Bacadehuachi, Bacerac, Bavispe, Cumpas, Huachinera, Huasabas, Moctezuma y Nacori chico sobresalen con mas de 30% de sus ranchos afectados por este problema. El problema de las plantas invasoras en la zona es aun mas serio, ya que 75 ranchos (58%) reportan dicho problema, siendo en este caso ocho municipios los que tienen 57% o mas de sus ranchos con este problema (cuadro 4). Los ranchos que al mismo tiempo tienen problemas por plantas tóxicas y plantas invasoras suman un total de 19 (15%). La especie tóxica mas importante en la zona es la hierba loca, la cual se mencionó como problema en 30 (23%) de los ranchos visitados, siguiéndole en importancia el garbancillo con 13 (10%) de los ranchos afectados. En cuanto a plantas problema por invasión, el taraquichi es la especie mas importante en la región, ya que se menciona como invasora en 39 (30%) de los ranchos visitados. Le siguen en importancia el chírahui, con 25 (19%); el mezquite, con 13 (10%), y la vinorama, con 12 (9%); (cuadro 4). Únicamente en 14 ranchos del total con estos problemas se han realizado algún tipo de control, siendo los métodos manual, mecánico y químico los mas utilizados.

AGOSTADERO RESEMBRADO EN EL RANCHO. Del total de ranchos estudiados, únicamente 11 tienen superficie de agostadero resembradas con zacates perennes introducidos, totalizando 707 ha establecidas. El zacate buffel es el mas importante, con 536 Ha ocupando un segundo lugar el zacate maravilla, con solo 171 ha del total mencionado. Este último es un zacate perenne débil con duración de dos a tres años. Este tipo de resiembras en la región es de inicio relativamente reciente, ya que de los 11 productores, siete sembraron por primera vez después del año 1980, y cuatro, entre 1975 y 1979. La utilización de estas áreas resembradas, en la zona, es básicamente durante las épocas mas críticas del año, cuando escasea el forraje en los agostaderos. Solo dos productores cosechan semilla de sus praderas, además de darles el uso de pastura de reserva. En lo referente al mantenimiento de estas praderas, ocho (73%) de los 11 productores no llevan a cabo ningún tipo de mantenimiento, siendo únicamente tres ganaderos (27%) los que realizan, ya sea control de plantas indeseables, subsoleo o resiembra.

CONDICIÓN DE LOS PASTIZALES. En base a estimaciones visuales en los predios visitados, 80 (61.5%) de estos presentan una condición regular de sus agostaderos; mientras que 29 (22%), y 21 (16%) tienen sus agostaderos en condición buena y mala, respectivamente (cuadro 5).

Con base a los resultados que arrojó la encuesta, se puede concluir que: La sobrecarga animal existente en los agostaderos de la zona, aunada a la mala distribución del pastoreo ocasionada principalmente por la insuficiencia de potreros en la mayoría de los ranchos, esta contribuyendo fuertemente en el deterioro acelerado de gran parte de los pastizales nativos, base de la actividad ganadera en esta región. Por otro lado, el problema de las plantas indeseables, tanto tóxicas como invasora, es de consideración y de incremento constante, siendo mínimo el número de productores que han tratado de controlarlas.

En cuanto a agostadero resembrado con zacate buffel, son pocos los ganaderos que han efectuado resiembras en sus ranchos con este zacate, ya que las condiciones climáticas y topográficas de gran parte de la zona no son favorables para su establecimiento.

CUADRO 4

DISTRIBUCIÓN DE LOS RANCHOS DE ACUERDO A LAS ESPECIES DE PLANTAS QUE

LES CAUSAN PROBLEMAS Y PORCENTAJE DE RANCHOS AFECTADOS, POR MUNICIPIO.