RESUMEN DE AVANCES DE INVESTIGACIÓN DEL CENTRO DE INVESTIGACIONES PECUARIAS DEL ESTADO DE SONORA, A.C.

SEPTIEMBRE 1980.

Es bien conocido que la mayoría de las leguminosas comúnmente empleadas pueden producir en rumiantes el timpanismo; sin embargo, este problema se reduce cuando se pastorea una mezcla de zacates-leguminosas, teniendo como mínimo el 40% de gramíneas. Este tipo de mezclas, generalmente consta de uno o mas zacates y de una o mas leguminosas y los principales factores que intervienen en su buen funcionamiento, son que el animal disponga de suficiente zacate en la mezcla para minimizar riesgos de timpanismo y mantener constante el porcentaje de leguminosas para obtener rendimientos satisfactorios sin la fertilización con nitrógeno.

El presente estudio se realizó en el CIPES, de octubre de 1976 a julio de 1979, con el objetivo de evaluar la producción forrajera de especies de gramíneas sembradas solas y en asociación con alfalfa y determinar los cambios en la composición botánica de las asociaciones. Para el experimento se utilizó la alfalfa y tres zacates de crecimiento en el verano: buffel, panizo azul y rhodes, en siembras solas, y alfalfa-buffel, alfalfa-panizo, alfalfa-rhodes y alfalfa-buffel-panizo-rhodes en mezcla. La densidad de siembra en las diferentes especies fue de 25, 6, 6 y 9 kg/ha para alfalfa, buffel, panizo y rhodes, respectivamente. En las mezclas se utilizó el 50% de alfalfa y 50% de zacates, tomando como base la densidad de siembra. Se fertilizó en presiembra con 100 kg de nitrógeno a los zacates y 100 kg de P205 (fósforo) a la alfalfa, zacates y mezclas. Después de cada corte se aplicaron 60 kg de nitrógeno por hectárea a los zacates.

En promedio de dos años de estudio, la composición botánica de las mezclas estuvo integrada en su mayor parte por alfalfa durante el período comprendido de febrero a junio, que es cuando la alfalfa logra sus mejores producciones durante el año; sin embargo, de julio a octubre los zacates dominaron en las mezclas, período de altas producciones para los tres zacates estudiados y bajas para la alfalfa. De noviembre a enero, la producción de las mezclas y la alfalfa sola, fue relativamente baja, siendo los zacates los de menor producción durante el invierno. Cabe aclarar que en el segundo año de estudio la producción de buffel fue nula de enero a marzo y panizo azul no produjo durante enero y febrero. En la mezcla de alfalfa-buffel-panizo-rhodes, en el segundo año de estudio, los zacates buffel y panizo terminaron por ser dominados por el rhodes ya que éste es un zacate que además de semilla se reproduce también por estolones.

En el Cuadro 1 se presentan los resultados de producción de forraje seco por hectárea, proteína por hectárea y contenido de proteína, durante los dos años de estudio. Se observa que rhodes, alfalfa-rhodes y alfalfa-buffel-panizo-rhodes fueron los que alcanzaron los mas altos rendimientos, promediando 28.14, 26.80 y 26.35 ton de forraje seco, le siguieron la alfalfa-buffel, alfalfa-panizo y alfalfa sola con 24.25, 23.28 y 22.30 y los de menor producción fueron el buffel y panizo solos con 20.9 y 15.35 ton de forraje seco por hectárea, respectivamente. La alfalfa-mezcla en el segundo año fue la de mayor producción (28.24 ton de forraje seco), debido en parte a la dominancia del rhodes sobre los demás zacates, el cual de entre los pastos sembrados solos, fue el de mayor producción en los dos años de estudio.

En cuanto a proteína, las mezclas y la alfalfa fueron las de mas alto contenido y promedió la alfalfa 22.4, las mezclas 21.2 y de entre los zacates el mas alto fue el panizo con 18.1, el buffel con 14.3 y rhodes con 14.0. En producción de proteína por hectárea, los mas altos fueron las mezclas y la alfalfa, promediando arriba de 5.0 ton/ha; entre los zacates, el rhodes fue el de mayor rendimiento con 3.94 ton/ha.

De los resultados de este estudio se concluye que las mezclas son factibles de utilizar por sus altos rendimientos de forraje, siempre y cuando se conserve una buena proporción de zacates y alfalfa en la misma.

Se recomienda la mezcla de alfalfa-rhodes, ya que presenta buenos rendimientos de forraje seco y proteína por hectárea por año y se pueden alcanzar hasta siete cortes con un rendimiento promedio de cerca de las 3 ton de forraje seco por hectárea por corte, de abril a octubre, y producción de 1.5 ton de forraje seco por hectárea por corte desde finales de otoño y todo el invierno (4 cortes).